viernes, 28 de septiembre de 2012

Para amar

Para amar se necesita perdonar.  Para poder perdonar se necesita permitir ser perdonado.  A partir del perdón comienza a limpiarse el corazón y la mirada.  Sin corazón limpio no hay mirada limpia.  Sin mirada limpia no hay amor.  Por eso nuestro señor Jesucristo nos exhortaba a ser como niños.